LAS CÍCLADAS I. SANTORINI

La Caldera de Santorini
Uno de los lugares considerados puntos energéticos del Planeta, Santorini tiene una luz, una energía, una magia espectaculares. Y te atrapa. No puedes dejar de mirar la Caldera. Imposible.
 
Llegamos con un vuelo Madrid- Athens-Santorini por unos 200e. Allí es temporada baja, así que las domatias (rooms to rent o bed and breakfast) salían a mitad de precio.
Teniendo en cuenta que también es uno de los lugares más exclusivos para el turismo y por consiguiente más caros, el visitarlo en otoño, a razón de lo vivido, es una extraordinaria elección. Muchísimos menos turistas, un tiempo excelente, sol y calor cada día, y los mismos servicios que en verano a mitad de precio.

Para ir con algo de información de allí podéis recoger una guía de las Cícladas muy chula y gratuita que te dan en la oficina de turismo de Grecia en Madrid, con rutitas a coche y a pie, lugares que visitar, platos que probar... ¡Te lo pintan todo tan bien que no sabes a qué islas limitarte! Ah y también te dan una hoja con un montón de direcciones para reservar alojamiento, coche, actividades acuáticas...
Aunque nosotros fuimos sin nada reservado a ver lo que iba saliendo, que es como más disfrutamos.

Nuestra primera domatia estaba a la entrada de Oia. Kiklaminos rooms. Por 40e habitación doble, vistas al mar y desayuno en la terraza al solete mañanero. La mujer un cielo y muy detallista. ¡Y ni papa de inglés que así mola más!
Alquilamos un coche por 16e/día. Nuestro "pocoyó", jiji...
 
Puesta de sol en Fira
Lo interesante está mirando hacia la Caldera. Los pueblitos blancos y azules, de casitas bajas de típica arquitectura cícladica se apelotonan a lo largo del borde de los acantilados que forman la linea de costa por este lado de la isla. Cuando lo ves desde el mar parecen montañas nevadas. Y retan a la gravedad lanzándose ladera abajo hasta que practicamente las construcciones quedan suspendidas en el aire. 
Tienes que recorrer sus sinuosas callejuelas, meterte en cada callejón, y estar preparado para subir y bajar un millón de escaleras porque si no no disfrutarás de la magia de estos pueblitos en los que la linea recta y el ángulo no existen. ¡Es el reino de la curva y de la cal!

Fira, Imerovigli y Oia.
Fira porque es la capital y de donde salen los barquitos para visitar la caldera (30e aprox). Es donde están esas infinitas escaleras que tienes que bajar y a la vuelta subir si te apetece en burrito y si no a pata esquivando las cacas y los culos de las docenas de burritos que hay apostados en los recodos con sombra de la escalinata. También hay un teléferico pero es menos glamuroso, ya te lo digo yo.
El sitio donde se apostan para ver la puesta de sol en Fira es justo en la parte de arriba de la escalinata de los burritos. Una pasada.

Imerovigli. Parece un pueblo completo dedicado al lojamiento turístico. Pero con tanta elegancia, delicadeza y buen gusto, que si no te paseas por él un par de horitas mínimo te habrás perdido algo delicioso. Y es allí dando una vuelta, donde nos prendamos del Prekas apartaments. Brutal. Así que reservamos en ese mismo momento una noche allí y pasamos el correspondiente día marmoteando en la piscina colgada del acantilado mirando como bobos la Caldera de frente.(70e tuvieron la culpa)

Prekas rooms
Oia... Es de cuento de las Mil y una Noches. Que serían las que yo pasaría aquí... Galerías de arte, artesanía, joyas, y la más famosa puesta de Sol. El más afamado lugar donde pedir matrimonio. El molino a la derecha, la iglesia a la izquierda, el Sol poniéndose frente a ti...¡Chicas, mucho cuidado porque como se arrodillen en Oia a la puesta del Sol no tendréis escapatoria!

Puesta de Sol en Oia

Oia
Excursión obligatoria: El paseo en barco por la Caldera. Pasando por el Cráter principal, Nea Kameni (2e para entrar), Palea Kameni donde te puedes dar un bañito en las Hot Springs y Thirasia donde comes al pie del mar en cualquiera de los chiringos de la mini playa.

Excursión por la Caldera

El resto de Santorini lo dejo a tu elección. Pero si te pierdes esto no habrás vivido la magia de esta isla.

Para comer: Por unos 30 euros te pones como el quico. Nosotros repetimos en dos. Uno en Imerovigli, en la calle alta más principal, de madera azul y blanco con vistas a la caldera y a la sombra de las bugambillas. Un queso frito y un bacalao con salsa de ajo y orégano que estaban para morirse. Y las berenjenas... siempre tan ricas las hagan como las hagan...
Y a la entrada de Oia, el Finikia restaurant
Justo al lado de nuestro alojamiento el Kiklaminos. Para chuparse los dedos.
El servicio siempre rápido y amable en todas partes.
Tenéis que probar la vaklaba de postre y el tzatziki para mojar pan y no parar y la musaka, y el pulpo cocinado con el vino dulce de allí y la pasta de tomates desecados al sol con aceite de oliva... ¡Por favor no dejéis de disfrutar de la cocina griega porque es una pasada! Yo me he puesto tibia.

ESPECIAL NOVIAS: Para las que soñéis con una boda maravillosa en un entorno de cuento y un álbum de fotos expectacular. Vuestro sitio es Santorini. Sin duda. ¡Hasta yo deseé tener un hermoso vestido blanco y que me fundieran a fotos sobre los tejados de Imerovigli!



El Paraíso de las Novias






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